En Wikipedia nos encontramos que el pensamiento se define como “aquello que se trae a la realidad por medio de la actividad intelectual”. Por eso, puede decirse que los pensamientos son productos elaborados por la mente, que pueden aparecer por procesos racionales del intelecto o bien por abstracciones de la imaginación.” Y también “fenómeno psicológico racional, objetivo y externo derivado del pensar para la solución de problemas que nos aquejan día tras día”.
Vemos que hace referencia a la forma en que los humanos afrontamos los problemas. Nuestra mente funciona según esquemas que varían y en los que influyen factores de personalidad, ambiente, inteligencia y motivación. Para la resolución de problemas la mayoría de nosotros utiliza el hemisferio izquierdo de nuestro cerebro donde se aloja el pensamiento vertical .
Utilizamos el pensamiento vertical para solucionar los problemas de forma lógica y analítica, siguiendo una secuencia de ideas que van encaradas a la consecución de un objetivo y que sirve para crear rutinas y facilitar el pensamiento automático.
En cambio, cuando no damos solución a problemas antiguos mediante el pensamiento vertical, necesitamos echar mano de nuestro hemisferio derecho, el “creativo” utilizando el pensamiento lateral.
El llamado “lateral thinking” o pensamiento lateral fue acuñado por Edward de Bono (1970), un psicólogo de Oxford que quiso aportar un nuevo modo de solucionar problemas y afrontar retos. Una perspectiva que nos permite movernos hacia todos los lados y no solo en línea recta, que permite adentrarnos en caminos menos evidentes, estimulando nuestra mente y aprendiendo en el mismo proceso.
Es un proceso de pensamiento en el que se busca fomentar la creatividad, sin dirección concreta, pudiendo saltar de un concepto a otro, aceptando cualquier idea, de forma libre y proactiva y que busca la calidad usando la imaginación.
Ambas formas de pensamiento son necesarias y complementarias, pues para integrar el pensamiento lateral es bueno utilizar el pensamiento vertical. Es importante tenerlo en cuenta ya que la creatividad según Csikszentmihalyi (1997) es un fenómeno que surge de la interacción entre 1) una persona creativa (con sus talentos, ambiciones y manías) 2) un área de logros en una cultura determinada y 3) el conjunto de personas o instituciones que juzga la calidad del trabajo producido. Se pueden generar productos muy creativos, pero si no suponen una mejora y la sociedad no aprecia su calidad, no será valorado como algo creativo.
Así es como vinculamos pensamiento lateral con creatividad y con innovación. Para aportar soluciones innovadoras y creativas debemos fomentar y desarrollarlo.
Para ello E. de Bono (1970) ha realizado diferentes técnicas como:
Búsqueda de alternativas: buscando diferentes enfoques, sin juzgar su validez. Un buen ejemplo de esto es la tormenta de ideas (Brainstorming).
Aplazar las valoraciones y el juicio hasta la fase final.
Desestructurar modelos de pensamiento analizando cada elemento por separado, rompiendo esquemas y prejuicios, para poder formar nuevos esquemas.
Identificar ideas dominantes para plantear alternativas reales. Es importante identificar el problema principal para poder buscar alternativas.
Y las herramientas que propone para aplicar estas técnicas son:
El dibujo, por su fuerza visual, como p.ej. los mapas mentales.
División; dividir el problema en partes pequeñas para reorganizarlas de otra forma
Inversión; Ir hacia atrás desde una solución, buscando nuevos enfoques pensando en el contrario
Imaginación creativa; Tormenta de ideas
Cambiar el punto de entrada: Volver al principio y cambiar el punto de enfoque (racional, emocional, crítico, optimista,..)
Analogías; para interpretar trozos de información, permitiéndonos enfocarnos en pequeñas partes del problema (Como el famoso dibujo de la obra “El Principito”. ¿Es un sombrero? ¿Es una serpiente que se ha tragado un elefante? ¿Es un elefante debajo de un sombrero?)
El pensamiento lateral se ha hecho un lugar importante en la psicología social e individual. Valoramos especialmente poder ser originales en nuestra forma de pensar apartándonos de lo rutinario y evidente.
Finalmente os dejo unos ejercicios para practicar el pensamiento lateral y os animo a buscar páginas de entrenamiento en internet, o mediante Apps como una que me han enseñado hace poco, llamada “Perloo”, que obliga a utilizar el pensamiento lateral.
*Ejercicio 1. “Hay seis huevos en una canasta. Seis personas toman, cada una, un huevo. ¿Cómo es que al final aún queda un huevo en la canasta?”
*Ejercicio 2. “Un hombre entró en un bar y solicitó al camarero un vaso de agua. Nunca antes se habían encontrado. El cantinero sacó un arma de debajo del mostrador y apuntó al hombre. El hombre dijo: “Gracias” y se fue. ¿Por qué?
*Ejercicio 3. “Pedro y Sara han aparecido muertos en el medio de una habitación. Están totalmente desnudos, empapados y rodeados por una gran cantidad de cristales rotos. La autopsia determina que han muerto de asfixia. ¿Qué crees que ha pasado en realidad?