En nuestro entorno cambiante (y a veces caótico) mantener el equilibrio se vuelve indispensable. En la vida no corremos carreras de corta distancia, sino de fondo, y es por ello que necesitamos aprovechar al máximo esos momentos en los que simplemente respiramos, meditamos, reorganizamos nuestra mente y disfrutamos de salir de nuestro día a día.
Repasando nuestros éxitos y fracasos de esta temporada no podemos estar más que orgullosos. Como siempre, nos hemos enfrentado a nuevos proyectos con resultados satisfactorios, hemos navegado por mares sencillos y también por aguas tormentosas. Nuestros éxitos nos han definido, sí, y nos han traído más y más proyectos, pero nuestros fracasos nos han aportado conocimiento y experiencia. Ambos escenarios nos han permitido seguir creciendo, en cantidad y en calidad, aumentando el alcance de nuestros servicios, ampliando nuestro equipo y mejorando nuestro nivel (profesional y humano, por supuesto).
Pero además de nuestro día a día, hemos hecho algo aún más grande: hemos puesto patas arriba el concepto de gestión de la acción en las organizaciones. Con el nacimiento de Synapcor, las empresas están conociendo una nueva forma de maximizar la eficiencia de sus procesos, lograndoestructuras sólidas capaces de enfrentarse al caos al que a veces se ven sometidas. Eventos con organizaciones de gran nivel, como IESE o CAAR, nos han puesto en primera línea y nos han convertido en un foco de innovación y transformación para la excelencia en las empresas. Hoy decenas de empresas quieren nuestra ayuda para seguir adelante, y nosotros debemos responder.
Quizá ahora toque tomar un respiro, no para desconectar, no para distanciarnos, sino para tomar carrerilla y estar a la altura de todos aquellos que han confiado y siguen confiando en nosotros. Sin ellos no somos nada, por lo que les seguiremos dando lo mejor de nosotros.
Sin más, desearos a todos unas estupendas vacaciones. A la vuelta más y mejor. ¡Un abrazo!